Pepsi-Cola Venezuela demostró la transparencia de sus procesos al comprobar que no hubo acaparamiento, pues el azúcar fue adquirida, importada, nacionalizada, almacenada y transportada, con la colaboración del Ministerio de Alimentación, para ser destinada exclusivamente como insumo en la elaboración de jugos y refrescos. Esto no afectó de ninguna manera el abastecimiento del producto para uso doméstico.
El juzgado también acordó el cese de la medida de aseguramiento del almacén ubicado en La Victoria, en el que se encuentra almacenada actualmente esta materia prima.
Pepsi-Cola Venezuela informa que sus niveles de inventario se normalizarán progresivamente, para seguir cumpliendo con el compromiso inquebrantable que tiene con la seguridad alimentaria de la población.